Revolución como término histórico

¿El término revolución se utiliza correctamente, o ha perdido el sentido que debería tener?

Según el Diccionario de la lengua española:

revolución

2. f. Cambio profundo, generalmente violento, en las estructuras políticas y socioeconómicas de una comunidad nacional.

3. f. Levantamiento o sublevación popular.

 4. f. Cambio rápido y profundo en cualquier cosa.

Así, parece claro que una revolución debe implicar un cambio, violencia, o ambas cosas. Es decir, no se trata de un término reservado a las políticas de izquierda, a pesar de que al pensar en revolución seguramente lo primero que nos venga a la cabeza sean la francesa, la rusa o la cubana; pero nadie suele pensar en movimientos autodefinidamente revolucionarios como la Falange Española de las JONS, el fascismo italiano, el Movimiento revolucionario conservador alemán, o la Revolución iraní.

A pesar de ello, parece que en la historiografía se tiende a referir a las revoluciones como solo de izquierdas, incluso hay llamadas revoluciones tranquilas, silenciosas o pasivas, las cuales no se corresponden con el término ya que se refieren más bien a procesos de cambio dilatados en el tiempo. En cambio, sí pueden considerarse revoluciones como tales aquellos movimientos no violentos que sí han producido cambios, como la Revolución de los Claveles portuguesa, o la Revolución Pacífica alemana.

Vistas estas cuestiones, parece adecuado que el término revolución se reserve para los amantes de los cambios repentinos o violentos, sea cual sea su orientación política.

Una revolución no es cualquier cosa

Breve historia de Ucrania (y Rusia)

Una cronología del gobierno de Kiev y su relación con Moscú, como punto de partida para analizar la actual invasión militar de Rusia a Ucrania.

¿Ucrania/Rusia, o Kiev/Moscú?

• 882: Oleg de Nóvgorod funda la hoy conocida como Rus de Kiev, un reino eslavo que llegó a extenderse desde el mar Negro hasta el mar Báltico.
• Los actuales pueblos de Ucrania, Bielorrusia y Rusia, además de otros grupos étnicos eslavos, reivindican a la Rus de Kiev como el origen de su cultura.
• 1157: Creación del Principado de Vladímir-Súzdal (el futuro Principado de Moscú) dentro de una disgregada Rus de Kiev, por Yuri Dolgoruki, considerado el fundador de Moscú y quien ansiaba el poder de Kiev (de ahí su apodo, Dolgoruki, el del Brazo Largo), donde falleció tras un breve gobierno.
• Tradicionalmente se considera al Principado de Vladímir-Súzdal la cuna del idioma y la nacionalidad rusas.
• 1240: Caída de la Rus de Kiev a manos de la invasión mongola de Batú Kan. El Principado de Kiev pasa a depender del Principado de Vládimir-Súzdal, estado vasallo de la Horda de Oro.
• 1362: El Principado de Kiev es conquistado por el Gran Ducado de Lituania, el cual, de forma similar a la Rus de Kiev, llegó a extenderse desde el mar Báltico hasta el mar Negro.
• 1569: El Gran Ducado de Lituania cede el ya para entonces voivodato de Kiev al Reino de Polonia, como acuerdo previo a la creación de la República de las Dos Naciones, que de nuevo se extenderá desde el mar Báltico hasta casi el mar Negro.
• 1648: Creación del Hetmanato cosaco, el cual devuelve el gobierno autónomo a Kiev perdido desde 1240, y promueve la cultura ucraniana.
• 1720: Pedro I de Rusia comienza una política de prohibición del idioma ucraniano y rusificación en los territorios ucranófonos del Imperio ruso, lo cual continuarán sus herederos hasta el fin del Imperio.
• 1775: Integración de todo el territorio del Hetmanato cosaco en el Imperio ruso, dentro de la Gobernación de Rusia Menor.
• 1917: La Revolución rusa que acaba con el Imperio ruso, y la Guerra de independencia de Ucrania desembocan en un periodo convulso de cinco años en los que se suceden diversos gobiernos ucranianos, los cuales fueron atacados por diferentes ejércitos extranjeros.
• 1922: La República Socialista Soviética de Ucrania, tras imponerse sobre el resto de gobiernos ucranianos, se convierte en una de las repúblicas constituyentes de la Unión Soviética, gobernada desde Moscú, y comienza un breve periodo de ucranianización.
• 1930: A partir de la consolidación en el poder de Iósif Stalin, la ucranianización soviética inicial se sustituye por la la rusificación y la prohibición del ucraniano, junto con la industralización y la llegada de gran cantidad de colonos rusos a las ciudades y las regiones mineras de Lugasnk y Donestk (el Dombás), donde se impone el idioma ruso, con lo que el idoma ucraniano queda relegado a las regiones rurales pobres, que sufren la hambruna del Holodomor.
• 1941: La Alemania nazi invade Ucrania e instaura el gobierno del Reichskommissariat Ukraine.
• 1944: El Ejército Rojo derrota a los nazis y se reinstaura la República Socialista Soviética de Ucrania.
• 1954: Nikita Jrushchov, dirigente de la Unión Soviética, realiza la transferencia de Crimea de Rusia a Ucrania por motivos administrativos.
• 1991: En plena disolución de la Unión Soviética, el parlamento ucraniano proclama la independencia de Ucrania, la cual es ampliamente apoyada por la población del Dombás, si bien en la década posterior la fuerte crisis dará el poder a oligarcas corruptos y se fomentará el viraje hacia opiniones prorrusas en la región.
• 2004: La Revolución naranja pone de manifiesto la división de Ucrania entre decantarse por la influencia de la Unión Europea y la OTAN (en plena expansión por países de la antigua Unión Soviética), o de la Federación de Rusia; el país se ha convertido en una posición crucial para ambos bandos, los cuales influyen en su política interna.
• 2014: Tras las revueltas del Euromaidán contra las políticas prorrusas del presidente ucraniano Víktor Yanukóvich, su sucesor Petró Poroshenko se decanta por la influencia europeísta y atlantista, tras lo cual Rusia se anexiona Crimea y comienza la Guerra del Dombás, donde Rusia apoya militarmente a los separatistas prorrusos.
• 2020: El presidente ucraniano Volodímir Zelenski continúa con las políticas europeístas; así, los gobiernos de Lituania, Polonia y Ucrania firman la alianza del Triángulo de Lublin (en recuerdo de la República de las Dos Naciones), entre cuyos objetivos está apoyar el ingreso de Ucrania en la UE y la OTAN, a las que ya pertenecen Lituania y Polonia.
• 2022: Vladímir Putin ordena una invasión militar de Rusia a Ucrania, la cual justifica para desnazificar y desmilitarizar Ucrania como defensa frente a la amenaza que supone, y como protección de las repúblicas populares recientemente autoproclamadas en el Dombás: la República Popular de Lugansk y la República Popular de Donetsk.

En resumen

Periodos de gobierno independiente en Kiev:

• 882 - 1240: 358 años (Rus de Kiev)
• 1648 - 1720: 71 años (Hetmanato cosaco)
• 1917 - 1922: 5 años (diversos gobiernos)
• 1991 - 2023: 32 años (estado actual)

Periodos de gobierno de Moscú en Kiev:

• 1240 - 1362: 128 años (Principado de Moscú)
• 1720 - 1917: 197 años (Imperio ruso)
• 1922 - 1941: 19 años (URSS)
• 1944 - 1991: 47 años (URSS)

Conclusiones

En un principio llama la atención que, a pesar de las políticas de rusificación, no solo la identidad ucraniana ha pervivido, sino que el sentimiento nacionalista ucraniano ha crecido tras la independencia de la Unión Soviética. En ocasiones este nacionalismo se vincula exclusivamente a ideas neonazis, lo cual fue argumentado por Vladímir Putin como pretexto para la invasión en 2022, pero lo cierto es que la mayoría de nacionalistas ucranianos no son neonazis (aunque sí de derechas, al igual que la mayoría de los gobiernos actuales del resto de países post-soviéticos), y que el neonazismo está presente en ambos bandos del conflicto, tanto en el Batallón Azov, como en el Grupo Wagner. Si bien analizar estos aspectos, no es objeto del presente artículo.

Retomando los hechos históricos anteriormente detallados, y teniendo en cuenta la larga trayectoria imperialista del Kremlin de Moscú, y su actual dinámica por absorber en la Federación Rusa las áreas habitadas por rusos étnicos en estados vecinos (herencia de los movimiento de población de la URSS), pueden identificarse los siguientes factores que han motivado a Rusia a invadir Ucrania:

• La ampliación de la OTAN a países de la antigua Unión Soviética, con el acercamiento de su armamento a las fronteras con Rusia que ello supone.
• El Euromaidán como fracaso de los gobiernos prorrusos en Kiev.
• La experiencia anexionista en las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur.
• La reciente experiencia militar en la Guerra civil siria.

A todo ello se puede sumar una muy posible necesidad de Vladímir Putin de resarcirse del avance de la Unión Europea y la OTAN en las antiguas repúblicas soviéticas, cuya influencia reclama para la Federación Rusa, lo cual necesita para mantener y fortalecer su posición de poder dentro y fuera de su país, así como para ser reconocido en la Historia como el conquistador de Kiev, la cuna de la patria eslava. Quizá una ya urgente necesidad personal a sus ya 71 años. No deja de resultar llamativo que declarase la invasión de Ucrania en 2022, 100 años después de la creación de la Unión Soviética con la adhesión de Ucrania. Y es que Yuri Dolgoruki y los orígenes de la cultura rusa no se olvidan en Moscú, tal y como demuestran el monumento a su fundador frente al ayuntamiento de la ciudad, erigido en 1954, y el primer submarino ruso de propulsión nuclear con misiles balísticos, el К-535 Yuri Dolgoruki, botado en 2008.

¿Putin se ve como un nuevo Dolgoruki con bulavas como largos brazos nucleares?

Por último, queda patente que la falta de fronteras geográficas importantes en la Llanura europea oriental ha fomentado una gran movilidad en las fronteras políticas entre el mar Báltico y el mar Negro a lo largo de la Historia, especialmente en los Campos Salvajes del sur y el este de Ucrania, donde se ubica el Dombás. Por ello, parece claro que la cuestión no es si estas fronteras políticas volverán a cambiar, sino cuándo. Y todo apunta a que después de Ucrania, los siguientes territorios en el punto de mira del Kremlin son las moldavas Transnistria y Gagauzia.

Documentales e informativos recomendados: Deutsche Welle

Tal y como puede leerse en Wikipedia: Deutsche Welle («Onda alemana» en alemán) o DW es un servicio de radiodifusión internacional financiada por el presupuesto fiscal federal alemán. Aunque financiado por el gobierno, el trabajo de DW está regulado por la Deutsche Welle Act,​ lo que significa que el contenido está destinado a ser independiente de la influencia del gobierno. Los objetivos declarados de la emisora son producir una cobertura de noticias confiable, proporcionar acceso al idioma alemán y promover el entendimiento entre los pueblos.

Ni los documentales ni los informativos de DW están libres de visualizarse sin la necesaria perspectiva crítica, pero sí es cierto que suelen tratar temas delicados, o menos generalistas en nuestro país, de una forma más rigurosa y que da pie a la reflexión.

Otro punto de vista a tener en cuenta

A continuación, enlaces a sus canales de documentales e informativos en YouTube, con algunos ejemplos:

DW Documental

• África, la ingeniería genética y la Fundación Gates
• China: ¿estado policial o laboratorio del futuro?
• Fe, poder, manipulación - Los secretos de la secta del Opus Dei

DW Español

• ¿Es Roblox un peligro para nuestros hijos?
• La guerra de Ucrania dispara el riesgo atómico a nivel global
• La mano dura de Bukele funciona, pero ¿a qué precio?

La importancia de aprender

Una serie de ideas para reflexionar sobre el aprendizaje y la educación formal. Algunas pueden parecer obvias, otras novedosas. En cualquier caso, pensar en todas ellas puede hacernos llegar a conclusiones interesantes.

• No deben infravalorarse la lectura y la escritura, ya que hay pendiente una revolución de la comunicación: Aunque ya se ha dado la revolución de la información, todavía está pendiente que la mayoría de los emisores sepan expresarse bien, y los receptores puedan interpretar el mensaje adecuadamente, especialmente en lo que respecta a la comunicación escrita. La comunicación escrita es más compleja que la oral, ya que está limitada únicamente a lo que se redacta, donde se excluye toda forma de comunicación no verbal, y en la mayoría de las ocasiones solo se da desde el emisor al receptor, sin posibilidad de interactuación debido a que ambos no coinciden en el tiempo. Por lo que, para que la escritura sea eficaz, esta debe ser clara y precisa, para así poder ser interpretada correctamente por un receptor con los conocimientos suficientes como para comprender el mensaje. La adopción global de una lengua franca no asociada ideologías o culturas y fácil de aprender, como el esperanto, también sería un gran avance en este sentido.
• Cuanto más vocabulario, mejor: Prácticamente pensamos solo con palabras, por lo que nuestro pensamiento depende de lo amplio que sea nuestro vocabulario; de cuántas palabras conozcamos, de lo claro que tengamos el significado de cada una de de ellas, y de lo capaces que seamos para utilizarlas.
• Lo aprendido es indeleble: Una vez adquirido, aquello que se aprende, no puede ser eliminado salvo por causa de enfermedad o muerte.
• El aprendizaje aleja los peligros de la ignorancia:
• La felicidad del tonto no es felicidad, es solo ignorancia.
• El ignorante desprecia el conocimiento porque su propia condición le impide valorarlo.
• La ignorancia lleva al miedo sobre lo que se desconoce, y el miedo lleva a la violencia irracional.
• Respecto al sistema educativo:
• No es lo mismo ir a clase que estudiar, y no es lo mismo estudiar que aprender.
• Si no se impone el pensamiento crítico, la educación se convierte en adoctrinamiento.
• El único objetivo de la educación pública debería ser la formación de la ciudadanía; mientras que el objetivo de la educación privada, ya sea concertada o no, siempre es adoctrinar, ganar dinero, o ambas.
• La educación debería ser únicamente pública, y obligatoria para los políticos y sus familias durante su ejercicio. De este modo, no les quedaría otro remedio que preocuparse por su buen funcionamiento.
• La seguridad vial, las nociones jurídicas básicas y el correcto uso de las nuevas tecnologías deberían ser materias obligatorias en el sistema educativo, ya que son conocimientos necesarios para poder desenvolverse en la sociedad actual.
• La religión debería permanecer totalmente al margen del sistema educativo, ya que pertenece al ámbito privado de las personas.
• Desarrollar un pensamiento crítico y no seguir ninguna doctrina es una necesidad que requiere de un esfuerzo constante, y es indispensable para la creación del propio ser. La falta del mismo es el origen de muchos problemas y conflictos humanos, ya que lleva a las personas a apoyar, conscientemente o no, los intereses de otros incluso aunque les perjudiquen a ellos mismos. Así, la formación del pensamiento crítico, puede permitir que a largo plazo se solucionen gran parte de los problemas de las sociedades humanas.

Aprendizaje: un esfuerzo constante

La absolución: una de las claves del éxito del cristianismo

Hace años, me llamó la atención una noticia similar a esta otra, en la que se decía que una organización mafiosa italiana amenazaba de muerte a un sacerdote católico que se había negado a oficiar el funeral de uno de sus miembros. Pero no me sorprendió por el uso de la violencia por parte la mafia, o por que haya personas que se opongan a estas organizaciones, sino por la importancia que los mafiosos le daban al funeral. Y es que el principal problema no era haberles repudiado, el problema fundamental era haberles negado el perdón divino.

Pero, ¿para qué necesita la mafia la santa indulgencia? Si se trata de una organización al margen del estado que no rinde cuentas ante nadie, en principio parecería irrelevante la postura eclesiástica. En cambio, es habitual que cuando las personas cometen actos crueles, para poder sobrellevarlo, necesiten algo que respalde que su comportamiento es correcto, o que al menos no tienen culpa. Y en este caso, la mafia lo encuentra en la absolución que les brinda el cristianismo, pues el sacramento de la penitencia es una magnífica válvula de escape moral en la que reconfortarse: con tan solo confesarse y hacer promesas de contrición y rezo, el sacerdote puede librarles del pecado, permitiéndoles continuar por el camino hacia el Cielo y alejarles del Infierno. La diferencia entre el goce y el sufrimiento eternos, que tiene su culmen en la llamada absolución de los muertos del rito del funeral.

Michael Corleone en el bautizo de su sobrino
mientras se ejecutan los asesinatos que ha ordenado
(El padrino, Francis Ford Coppola, 1972)

Es decir, si se cree en la barata y rentable absolución que ofrece el cristianismo, aunque se hagan todos los males habidos y por haber, el arrepentimiento únicamente de cara a la Iglesia es suficiente para librarse de toda culpa y poder considerarse buena persona. Borrón y cuenta nueva, a seguir hasta la próxima, que aquí no ha pasado nada. Con lo cual, con tan solo esta herramienta espiritual no es de extrañar que la Iglesia haya conseguido captar adeptos y mantenerlos fieles. Otra cosa es la calidad moral de estas personas, porque cuanto peor les haga sentir su comportamiento, más necesidad tendrán de acudir a la sagrada salvación.